"No hay más camino para el final de ETA que su derrota", aseguró ayer María del Mar Blanco, hermana del concejal asesinado hace 10 años y presidenta de la fundación que lleva su nombre. Durante un acto en Vitoria, después de la llegada a la capital alavesa del autobús que ha recorrido varias ciudades con el lema 10 años sin Miguel Angel Blanco. Retorno a Ermua, pidió a los partidos políticos mayoritarios que recuperen el consenso y las movilizaciones democráticas. Además, Blanco lamentó que, a diferencia de lo que ocurrió hace diez años, en el País Vasco "vuelve a haber miedo".