Muchos políticos expresaron ayer su opinión sobre la definición de Cataluña como "nación", aprobada el miércoles en el Parlamento catalán. En el PSOE, muchos cuestionaron en privado el encaje constitucional del primer artículo del Estatuto, pero fueron José Bono y Juan Carlos Rodríguez Ibarra quienes más presionaron para que José Luis Rodríguez Zapatero rechace ese término cuando el texto llegue al Congreso.

Ibarra aseguró que el presidente "jamás va a permitir que Cataluña sea una nación". Añadió que sus compañeros del PSC "saben que lo que están aprobando no va a ningún lado", y consideró "inútil" el esfuerzo del Parlamento, pues no pasará el filtro de las Cortes. Mucho más sutil, Bono dejó patente que confía en que el PSOE lo elimine del texto. El titular de Defensa suscitó el debate en el Congreso al aludir al Estatuto durante la discusión de ley de tropa y marinería.

El líder del PP, Mariano Rajoy, denunció que el artículo primero del Estatuto supone la "ruptura de la Constitución de 1978".