Juan José Ibarretxe no quiere permitir que un eventual acuerdo entre los partidos vascos sea rebajado en las Cortes. Ayer alertó de que el acuerdo político que se logre en la mesa que quiere constituir a partir de septiembre será sometido a "consulta popular", porque no está dispuesto a que la sociedad vasca decida sobre algo que "previamente se haya cepillado en Madrid".

El lendakari hizo así referencia a lo manifestado por Alfonso Guerra, que, en el Congreso de las Juventudes Socialistas, se jactó de que el Congreso se había "cepillado" el plan Ibarretxe y también el Estatuto catalán. "La decisión se va a tomar en Euskadi y no en Madrid", dijo.

COMPROMISO Ibarretxe precisó que el compromiso de los socios del Gobierno y el suyo propio es promover la constitución de una mesa en la que todos los partidos busquen un acuerdo con "mayorías amplias", que, sin embargo, no cuantificó. Explicó que cada partido presentará en ella sus proyectos, pero matizó que, en todo caso, "el corazón" de la llamada "normalización política" pasa por el "derecho a decidir" o, lo que es lo mismo, el derecho de autodeterminación.

El siguiente paso tras lograr ese acuerdo político sería someterlo a "consulta popular" en Euskadi y, después de ratificado, llevarlo a las instituciones.

Este procedimiento no sigue la pauta por la que se tramitó el conocido como plan Ibarretxe, ni tampoco la que recoge el Estatuto vasco de autonomía para su eventual modificación. Ibarretxe alegó que, por tratarse de un "acuerdo político", lo que decida esa mesa no tendría que seguir las pautas que rigen para aprobar nuevas normas.

Sin embargo, la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, subrayó que el procedimiento de toma de decisiones está claro en la Constitución y los estatutos. Aunque evitó polemizar porque "no es razonable ni prudente" especular sobre declaraciones.

CENSURA Y DESMARQUE Quien sí censuró abiertamente a Ibarretxe fue el coordinador del PSE, Rodolfo Ares, que acusó al lendakari de "saltarse" la legalidad con su propuesta. El secretario general del PSE de Guipúzcoa, Miguel Buen, recordó que serán los partidos y no Ibarretxe quienes decidan sobre la mesa. Ibarretxe confirmó que los partidos trabajan ahora en fijar las reglas con las que tendrá que funcionar el foro que les reúna para buscar un acuerdo "pendiente desde hace 167 años".

Aunque el PP ha declinado participar en la ronda de contactos del lendakari, Ibarretxe reiteró que "las puertas de Ajuria Enea" siguen abiertas. Dio por seguro que el PP se unirá, pero recalcó que ninguno es "imprescindible". El secretario general del PP vasco, Carmelo Barrio dijo que su partido no se sentará en una "mesa extraparlamentaria" con "los terroristas".