Juan José Ibarretxe dejó claro ayer que, sea o no candidato del PNV en las elecciones del próximo marzo, no renunciará a su consulta soberanista, ya que cree en ella como "la llave" de la solución al problema vasco.

En su último gran discurso parlamentario de la legislatura, no aludió a los comicios, pero sí se comportó como si se hubieran convocado al defender con ardor la gestión del tripartito y sentenciar que los argumentos del Tribunal Constitucional y del PSOE para impedir la celebración de la consulta son los mismos que esgrimió "la dictadura franquista" para defender una "España imperial".

Dispuesto a sacarse las espinas acumuladas en los últimos meses por las severas criticas recibidas a su iniciativa política, el lendakari aprovechó el debate de política general para exhibir "orgullo" por la tarea realizada y leer la cartilla a sus adversarios socialistas y populares por el "fracaso" que le adjudican.

Al secretario general del PSE, Patxi López, quien le acusó de "inmovilismo", le reprochó que se comporte como un "delegado del Gobierno" y le dijo que su partido "no es de fiar"

Al portavoz del PP, Leopoldo Barreda, que le describió como un lendakari "del pasado", le recordó que él ha visto pasar a muchos primeros espadas por la tribuna de la Cámara, como Jaime Mayor Oreja, Carlos Iturgaiz y María San Gil. Además, y para neutralizar la imagen de apertura en los populares vascos, preguntó "para qué" han cambiado a la presidenta si mantienen el mismo discurso. El tono preelectoral se mantuvo durante un debate de ocho horas sin que Ibarretxe aludiera a la fecha en que convocará las elecciones. De todas formas, pormenorizó las actuaciones del Ejecutivo y su apuesta por políticas sociales. Pero lo que sobre todo hizo Ibarretxe fue lanzar una durísima andanada contra José Luis Rodríguez Zapatero, a quien acusó de "castigar" a los vascos al negarles las trasferencias reconocidas en el Estatuto. Llegó a decir que el Estado actúa en contra de las iniciativas que ponen en marcha las instituciones vascas para luchar contra la crisis.

MENOR TENSION Aunque con menor tensión que en otras ocasiones, el debate enfrentó fundamentalmente a Ibarretxe con el PP y el PSE. Los dos partidos vaticinaron un cambio y el líder del PSE habló de un "nuevo tiempo" apuntado ya por los vascos en las elecciones del pasado marzo.