"Es un disparate descomunal". Así respondió ayer el presidente de Melilla, Juan José Imbroda, a la propuesta de los dos principales partidos políticos marroquís de llevar el caso de las dos ciudades españolas del norte de Africa a la llamada Cuarta Comisión de Naciones Unidas, el organismo encargado de los procesos de descolonización en el mundo.

La Agrupación Constitucional Unificada (grupo mayoritario en el Parlamento marroquí) y el Partido Autenticidad y Modernidad (próximo a la familia real) echaron mano de la retórica patriótica el pasado viernes, en respuesta a la decisión del Congreso de los Diputados de condenar, aunque fuera tímidamente, los incidentes de El Aaiún.

VISADO A LOS ESPAÑOLES Por ejemplo, reclamaron que, además de llevar el caso de Ceuta y Melilla a la ONU deberían organizarse "comisiones de audición para las víctimas de los crímenes contra la humanidad cometidos por el Estado español en su guerra colonial contra el pueblo marroquí, tanto en el norte como en el sur del reino". En un plano más práctico, pidieron al Gobierno marroquí que exija visado a los españoles para cruzar la frontera.

La escalada retórica llevó ayer al presidente de Melilla a reclamar al Ejecutivo español un respuesta inequívoca, que debería consistir --según Imbroda-- en "ponerse un poquito firme con ellos, llamarles la atención y decirles que ya está bien".

En opinión del mandatario autonómico, que Marruecos se esté centrando en la soberanía de dos ciudades españolas es un "disparate descomunal", sobre todo teniendo en cuenta el conflicto que tiene ese país actualmente, en relación al Sáhara Occidental. "Con la que está cayendo y la que tienen liada, tras 30 años, tienen bastante tema como para que se preocupen de ello e intenten arreglarlo en paz y respetando los derechos humanos", manifestó.

Imbroda se mostró convencido de que lo que se está haciendo es "engañar a la población" con acusaciones, por ejemplo, contra la prensa española con el pretexto de querer "montar un conflicto internacional y diplomático", con anuncios de marchas sobre Ceuta y Melilla. "Esto no se sostiene", aseveró.

ACERCAMIENTO A EUROPA En cualquier caso, el presidente de la ciudad autónoma insistió en su deseo de que España y Marruecos mantengan unas buenas relaciones y se mostró a favor de apoyar al país vecino "en todos los niveles" para que se desarrolle democráticamente y econó- micamente, para que se acerque más a Europa.