Ya son 30 los imputados por el 11-M. Había 29, y cuando Estrasburgo decida, serán 30. El número 30 era de la policía, como decían algunos, y político, como también sostenían. Recordemos que lo encontró el abogado que tanto buscaba conspiradores, la sorpresa es que fuera del PP.

Agustín Díaz de Mera no declaró por honor y honestidad a su fuente. ¿Qué honor tenía con los afectados? ¿Si fuesen muertos de ETA se sentiría más identificado? Le habrían dado más votos. Y tras esto nos escupió a la cara, con la fábula del "he oído, me han dicho que uno que vio a otro que le dijo que otro manipuló..." ¡Ojalá se pudra en la cárcel, y algunos otros con él! Que los que han vomitado noticias con las mismas pruebas que De Mera acaben delante de un tribunal.

Mienten, aunque el azar les haga acertar, porque hablar sin saber es mentir. Y hacerlo para obtener votos es un delito, o debería serlo, no soy abogado. ¿Saben por qué nadie se disculpará por nada de lo que haga gente como De Mera? Porque ahora tendría que decir: "Lo siento, idiotas, llevo tres años riéndome de vosotros, creando odio y talibanismo entre los que me creen, para no perder mi poder, para asegurarme los votos. Pido disculpas por trataros como lo que sois, chusma". Es muy difícil decir esto, así que la justicia, si hay pruebas, tendrá que actuar.