La investigación sobre las causas que provocaron el accidente aéreo de Turquía en el que fallecieron 62 militares españoles va para largo. El turco Umit ‡endek, jefe de la comisión que estudia la catástrofe ocurrida el 26 de mayo, adelantó ayer que descarta cualquier fallo técnico como explicación de la tragedia y que las conclusiones de la investigación "tardarán mucho". Descartados los problemas mecánicos, sólo queda pensar que un error humano provocara la catástrofe, tal como apuntó el Ministerio de Defensa.

‡endek confirmó que una de las cajas negras del aparato --la que graba los diálogos entre los miembros de la tripulación-- ya estaba averiada antes de que se produjera el accidente. Y admitió que esa información habría "ilustrado claramente los motivos del siniestro". Sin ella, añadió, la investigación sólo podrá apuntar la "causa probable" del accidente. El Ministerio de Defensa señaló recientemente que el sistema de cajas negras era "un elemento más para establecer las causas".

AVION "SIN PROBLEMAS"

‡endek apuntó ayer que no hubo "ningún problema con el avión", ni negligencia alguna por parte de los controladores de la torre del aeropuerto turco de Trebisonda, ni "problemas meteorológicos", contra lo que apuntó el día del accidente el ministro de Defensa, Federico Trillo.

El general Francisco Sánchez Borrallo, delegado español en la comisión, corroboró las tesis del experto turco, aunque no quiso apostar por un "error humano" del piloto al marcar el rumbo. "Es sólo una hipótesis", declaró. El jefe de la investigación descartó también que el Yak-42 necesitara combustible, porque al estrellarse hubo una "fuerte explosión".

El Yakovlev 42 con tripulación ucraniana abortó un primer intento de aterrizaje. Al volver a intentarlo, desvió inexplicablemente su ruta hacia el sur, cuando debía ir al este. Los investigadores tratan de explicar por qué lo hizo. Después, se estrelló a las 1.15 horas (3.15 de la madrugada, hora española) del 26 de mayo.

La comparecencia de ‡endek ante la prensa incluyó momentos de tensión, especialmente cuando Curra Ripollés, hermana de uno de los fallecidos en el siniestro, el comandante José Manuel Ripollés, pidió al experto confirmación sobre el estado de la caja negra.‡endek corroboró que estaba averiada antes del accidente, pero no explicó por qué el aparato volaba con ese elemento estropeado. La mujer opinó que esas "confusas" explicaciones "tienen que ocultar algo".

CAJAS NEGRAS SIN SELLAR

Las autoridades de aviación civil ucranianas afirman que las cajas negras no estaban selladas, y aseguran que eso contradice las normas internacionales. El representante ucraniano en la comisión de investigación, Yuri Kordianyn, denunció en la SER que las cajas llegaron sin sellar a la comisión.