Instituciones Penitenciarias quiere curarse en salud. Por ese motivo pidió ayer a la fiscalía de la Audiencia Nacional que inste al tribunal a permitir el traslado del etarra Iñaki de Juana Chaos al hospital que le pueda ofrecer el mejor tratamiento en el caso de que su estado de salud --a día de hoy estable-- empeore, tras 55 días en huelga de hambre.

La administración penitenciaria no quiere correr riesgos con el exjefe del comando Madrid , por lo que pidió ayer al fiscal que reclamara a la sala penal que le permita aplicarle una instrucción dictada en enero para los condenados que reciben asistencia sanitaria. Esa instrucción no se puede usar con los presos preventivos como De Juana.

El etarra empezó una huelga de hambre el 8 de agosto. Desde el 19 de septiembre está en el hospital de Algeciras (Cádiz) donde fue trasladado tras sufrir un empeoramiento grave de su estado de salud. Desde ese día, recibe alimentación asistida y los médicos lo han estabilizado.

Sin embargo, los facultativos han advertido de que el estado de salud de De Juana puede empeorar, ya que está en el llamado grupo de riesgo al haber superado la cincuentena. Por ello, Prisiones reclamó ayer autorización de la Audiencia Nacional -- que le fue otorgada-- para cambiarle de centro en el caso de que los médicos consideren que debe recibir otro tratamiento en un hospital más especializado.

El fiscal alegó ante la sala la necesidad de llevar a cabo las medidas necesarias para garantizar la presencia de De Juana en el juicio que se va a celebrar contra él el próximo 27 de octubre. En esa vista, el terrorista se enfrenta a una petición fiscal de 96 años de cárcel por dos escritos publicados en el diario Gara .

Fuentes fiscales han informado que esa calificación se rebajará y se ajustará, por ejemplo, a la condena impuesta a otro etarra, Iñaki Bilbao, que ha sido castigado con dos años de prisión tras amenazar al juez Garzón.

UN ZULO EN FRANCIA Por otra parte, la policía francesa localizó la pasada semana un zulo de ETA en Bidarray, muy cerca de la frontera con España, con 175 kilos de material para fabricar explosivos y seis armas. Se supo ayer también que los gendarmes requisaron el día 24 en las Landas documentos y material informático de la banda. Fue un excursionista el que lo halló.