La tormenta política por la presunta responsabilidad de las administraciones públicas en la trama de Marbella se recrudeció ayer tras desvelarse que el juez instructor se opuso a que la Junta de Andalucía se persone como acusación particular, al ser más beneficiada que perjudicada por la ilegalidad urbanística.
El juez se basó en que el Gobierno andaluz tiene competencias en urbanismo y en que cobró los impuestos de las viviendas ilegales. La Junta considera que se trata de una "opinión" del juez, mientras que el PP pide que se devuelvan esos ingresos tributarios.
El juez Miguel Angel Torres desestimó en uno de sus autos el recurso de reforma del Ejecutivo regional contra su decisión de personarse como acusación particular, al entender que, en atención a sus amplias competencias, en particular en materia de urbanismo, "la situación de la Junta está más próxima al responsable civil". El magistrado llega a afirmar que se acerca incluso al "partícipe a título lucrativo", dado que percibió "ingresos tributarios de todas las licencias ilegales concedidas hasta las detenciones". El juez también critica que "no haya podido, sabido o querido ejercer dichas competencias dando lugar a la situación actual".
Estas consideraciones no han sentado nada bien a la Junta, que siempre ha defendido que hizo todo lo que pudo y presentó 400 recursos contra las actuaciones urbanísticas en Marbella. El presidente de la Junta, Manuel Chaves (PSOE), consideró en una entrevista televisiva que son "apreciaciones subjetivas" del juez, dado que la Junta solo podía impugnar ante los tribunales y la fiscalía las licencias concedidas por el consistorio.
Mientras tanto, la esposa de Juan Antonio Roca, María Rosa Jimeno, y su hermano, quedaron ayer en libertad bajo fianza de 90.000 y 60.000 euros acusados de blanqueo. La hija de Roca, María, y una de las empleadas del cerebro de la trama marbellí quedaron en libertad con cargos. Fuentes de la defensa de estas últimas señalaron que les preguntaron por la supuesta compra de lotería premiados, que negó.
