El juez instructor del caso Gürtel en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), Antonio Pedreira, ha levantado la imputación a diez personas, entre ellas, el sastre José Tomás, que supuestamente confeccionó los trajes que la trama regaló a Francisco Camps y otros cargos políticos valencianos.

En el auto, Pedreira accede a la petición de la Fiscalía Anticorrupción y decreta el sobreseimiento provisional de la causa respecto a José Tomás, al considerar que no consta el conocimiento por parte del sastre "de la finalidad de las compras efectuadas por los imputados, así como si se correspondían o no con gastos propios de las empresas que representaban".

Tomás, que ha prestado declaración en varias ocasiones en la causa, tanto en Madrid como en Valencia, trabajó para las tiendas Milano y Forever Young, en las que asegura que atendió, entre otros, al presidente de la Generalitat valenciana, Francisco Camps, para quien confeccionó varios trajes a medida supuestamente pagados por la empresa Orange Market, perteneciente a la trama Gürtel.

DUDAS SOBRE LA AUTORÍA

El sastre estaba imputado por falsedad documental precisamente en relación con las facturas libradas por esas prendas de ropa, pero el juez sostiene que las investigaciones han determinado "una duda importante en relación con la autoría de la falsedad en el seno de los establecimientos en los que aquel trabajó".

Otro de las razones por las que Pedreira ha acordado levantar la imputación a José Tomás es que las diversas declaraciones prestadas en la causa han confirmado la conclusión de la sentencia del Juzgado de lo Social número 8 de Madrid, que el 13 de julio de 2009 declaró improcedente el despido del sastre de Forever Young.

El instructor del caso Gürtel ha retirado también la imputación que pesaba sobre otras nueve personas, entre las que se encuentra el empresario colombiano Miguel Uriel Hernández Chavarro, que buscaba inversiones inmobiliarias en Colombia por encargo de Correa.

NO A UN NUEVO AUTO

Pedreira ha rechazado la petición de Correa de que se dicte un nuevo auto detallando las imputaciones que pesan contra él, al poner en duda las conclusiones de los informes periciales que determinaron las cuotas tributarias presuntamente defraudadas.

Uno de esos informes, realizado por la Agencia Tributaria sobre la actividad económica de los imputados entre 2002 y 2007, aseguraba que Correa, que no hizo la declaración de la renta en ese periodo, "debería responder a título de autor de los delitos relacionados con su IRPF cuya cuota total asciende a más de 18 millones de euros".

El instructor rechaza la petición de Correa al considerar que, en realidad, lo que pretende es conocer "cuál podrá ser en el futuro el contenido del auto y que las acusaciones le digan cuál va a ser el contenido de sus escritos de acusación". "Es obvio que en este momento no procede en absoluto", concluye Pedreira.