Si alguien se preguntaba qué iba a hacer el juez Fernando Grande-Marlaska después de ocupar durante más de un año el puesto de Baltasar Garzón, desde donde tomó algunas de las decisiones más controvertidas en el ámbito judicial de los últimos tiempos, ayer obtuvo la respuesta. El magistrado de la Audiencia Nacional anunció que presentará su candidatura como vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).

A pesar de que el PP en muchas ocasiones ha elogiado su mano dura contra los dirigentes de Batasuna y casi le ha considerado su prolongación en la Audiencia Nacional, el juez aseguró que se presentará como independiente. Precisamente su motivo es que considera que el órgano de gobierno de los jueces debe estar menos politizado. Actualmente solo hay un vocal independiente.

Grande-Marlaska tiene que reunir antes del 26 de septiembre 85 avales de jueces que no pertenezcan a ninguna asociación de la profesión para que sea aceptada su candidatura. En el actual Consejo solo resultó elegido un vocal del cupo de jueces independientes, Agustín Azparren. Aunque bastantes magistrados podrían querer optar por esta vía a vocal del CGPJ, aparte de la dificultad que supone para ellos no contar con el apoyo de una asociación judicial, el reunir el número de firmas para cubrir el aval es, en algunas demarcaciones pequeñas, complicado.

Con la vista puesta en las elecciones al CGPJ, ayer los presidentes del Congreso y del Senado, Manuel Marín y Javier Rojo, y el representante del CGPJ, Francisco José Hernando, firmaron un acuerdo para la renovación de los 20 vocales del Consejo, ya que el mandato de los actuales concluye el 7 de noviembre.

Según la ley, 12 de los vocales deben ser jueces, promovidos por alguna asociación o bien independientes. Los ocho restantes son propuestos por los partidos políticos entre abogados y juristas con 15 años de ejercicio. Se da la circunstancia que la elección de los vocales requiere una mayoría cualificada en las Cortes (cada cámara elige la mitad). Por tanto, en el Congreso, es imprescindible que el PSOE y el PP se pongan de acuerdo.