"Hay que mirar al futuro y tener en cuenta nuestro ilusionante presente, a pesar de que el pasado ha sido muy duro. Somos muchos los que no queremos perder este tren. Hay mucho dolor que respetar, pero solo queda dialogar. Espero que los políticos bajen a la calle y se pongan en la piel de la gente para darse cuenta de que, por encima de los intereses de cada partido, hay que buscar entre todos soluciones".