El Gobierno vasco acusó ayer al Foro Ermua de cometer un "delito de contramanifestación" durante el acto de apoyo al lendakari, Juan José Ibarretxe, convocado por el PNV la mañana del lunes ante el palacio de justicia de Bilbao. La portavoz del Ejecutivo, Miren Azkarate (PNV), evitó opinar sobre la agresión ya denunciada ante el juez por el miembro del foro y exmilitante del PSE, Antonio Aguirre, y dijo que no se pronunciará hasta que la Ertzaintza concluya su informe.
Azkarate precisó que el delito de contramanifestación artículo 514 del Código Penal se concretó en múltiples gritos e insultos, como "fascistas, asesinos o nacionalistas de mierda", que miembros del foro promotor de la querella contra el lendakari habrían dirigido hacia los peneuvistas. Apuntó que esta actitud fue de "clara provocación" ante quienes "cívicamente" manifestaban su solidaridad a Ibarretxe ante la imputación del delito de desobediencia por hablar con líderes de Batasuna.
La Ertzaintza realizaba ayer el informe sobre los incidentes e intercambio de insultos.
Azkarate apuntó que cuando el Gobierno disponga del informe oficial valorará si inicia acciones legales contra el Foro Ermua. Además, medios del Ejecutivo señalaron que ningún centro sanitario había emitido un informe de lesiones tras la patada que Aguirre recibió en los testículos y que le hizo caer al suelo.
Sin embargo, el abogado del Foro Ermua, Fernando García-Capelo, confirmó que durante la tarde del lunes y antes de presentar denuncia en el jugado de guardia, Aguirre fue examinado por un médico forense.
El PP de Bilbao identificó con nombres y apellidos a un afiliado del PNV en la capital vizcaína como autor de la patada y reclamó que el partido adopte medidas. El foro quiere además que se "depuren" responsabilidades por no haber retenido al agresor.
