El ciudadano holandés Liberto Van der Dussen, encarcelado desde hace 12 años, ha abandonado este jueves la prisión de Palma, un día después de que el Supremo anulara la pena de seis años por una de las tres agresiones sexuales por las que fue condenado. Las pruebas de ADN han demostrado que no era culpable de una de las violaciones y probablemente tampoco lo sea de ninguna de las otras dos.

Van der Dussen ha cruzado el portón de la cárcel a las 17.02 horas acompañado del capellán de la prisión, Jaume Alemany, uno de sus abogados, y de un representante de la embajada de Holanda en España. Ya en el exterior de la cárcel, donde era aguardado por un grupo de periodistas, ha dicho, muy enfadado: "No puedo explicar lo que he sufrido, no se lo deseo ni a mi peor enemigo".

LIMPIAR SU NOMBRE

"Tengo sentimientos encontrados en estos momentos. No me han hecho justicia. No voy a perdonar lo que me han hecho, quiero limpiar mi nombre", ha comentado el hombre tras proclamar que es inocente de las tres agresiones sexuales. También ha lamentado no haber podido estar junto a su madre en Holanda durante los últimos días de su vida, y ha apuntado que no tiene intención de regresar a su país "hasta que haya limpiado" su nombre en España.

"Ha sido una injusticia. Ha padecido mucho estos años.Tendremos que acudir a un psiquiatra para que elabore un informe por el sufrimiento que ha padecido", ha añadido, por su parte, el abogado.

PARECIDO FÍSICO

La Audiencia de Málaga condenó al holandés a 15 años y medio por las tres violaciones pero el Supremo decidió el pasado noviembre admitir a trámite el recurso de Van der Dussen, basado en un informe de la Policía Científica que apunta a que el verdadero autor de la violación fue un hombre de nacionalidad británica acusado en su país por la violación y homicidio de una joven. El alto tribunal ha acabo anulando una de las tres condenas, de modo que le ha quitado seis años y seis meses. Las otras dos las ha mantenido pero la reducción ha sido más que suficiente para que haya salido a la calle.

La condena inicial se basó en la identificación llevada a cabo por las tres víctimas de las agresiones sexuales cometidas en Fuengirola en el año 2003. Frente a ello, la defensa del holandés siempre ha sostenido que las nuevas pruebas de ADN apuntaban al británico Mark Phillip Dixie, cuyo parecido físico es indudable. Los nuevos análisis se llevaron a cabo con técnicas más precisas y avanzadas que permiten una identificación más certera.