"No conozco ese asunto". El candidato del PP a la Moncloa, Mariano Rajoy, despachó ayer con esa frase el escándalo del alcalde del municipio coruñés de Toques, Jesús Ares, del PP, condenado por abusos a una menor.

El vicepresidente primero del Gobierno, Rodrigo Rato, también intentó soslayar el escándalo remitiéndose a "las declaraciones del presidente del PP en Galicia", Manuel Fraga. Este dijo el jueves que había encargado un informe, pero añadió que no veía motivos para una "acción inmediata" contra el alcalde.

Ares pidió ayer la suspensión cautelar de militancia hasta que se resuelva el recurso que ha presentado contra la sentencia que lo condena a pagar 6.000 euros por un delito de abusos sexuales. El líder socialista, José Luis Rodríguez Zapatero, exigió ayer su retirada "de la vida pública".