El ex ministro español de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, desmintió hoy las filtraciones de WikiLeaks, donde se señala que el Gobierno español trabajó para que no prosperasen la orden de detención internacional contra los soldados involucrados en el asesinato del cámara José Couso en Bagdad. "El Gobierno siempre trabajó observando la legalidad", explicó a Efe López Aguilar, quien recordó que "en España es imposible interferir en la Justicia, porque el sistema constitucional lo hace imposible". "Las filtraciones de Wikileaks sólo pueden comprometer a Estados Unidos y a sus funcionarios, en ningún caso a terceros", indicó el ex ministro, ya que son "documentos de acuerdo a los intereses de EEUU y están escritos en su lenguaje". López Aguilar, quien participa en varsovia en una reunión de los socialistas europeo, sostuvo que "el objetivo de estos documentos es que una serie de funcionarios demuestren a sus superiores jerárquicos su capacidad de actuación y sus influencias". "Se trata de versiones interesadas que estos funcionarios transmiten a sus superiores, por lo que no pueden ser prueba de nada", añadió. El ex ministro considera que lo normal es inflar este tipo de documentos que el funcionario de embajada transmite a su superior, y que "otra cosa diferente es la realidad". "El Gobierno respetó en todo caso la legalidad y actuó de acuerdo a sus criterios", "no admitió ninguna presión", sino que, al contrario, desarrolló políticas que "a veces no fueron satisfactorias" para Washington, añadió. Los documentos filtrados por WikiLeaks a 'El País' apuntan a un apoyo del Ejecutivo español a la embajada de EEUU en el 'caso Couso'. WikiLeaks ha filtrado un cable del embajador estadounidense a la secretaria de Estado de EEUU, Condoleezza Rice, en el que aseguraba que el Gobierno español había "ayudado entre bastidores" a que la fiscalía apelara las decisiones del juez.