La Administración de Lotería número 14 de Badajoz, ubicada en la avenida Carolina Coronado, en la barriada de la Estación, ha vendido 45 billetes del quinto premio, cantado esta mañana pasadas las once.

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La dueña de la administración, Carmen Teresa García Martín, estaba nerviosa, nunca había visto tantos medios de comunicación en su local. Su empleado, Juan Pedro Gimeno reaccionó y fue a buscar la botella de champán que todos los años reservan en la nevera, pero que siempre vuelve a casa porque es la primera vez que esta administración vende un premio importante de la Lotería de Navidad, no así otros premios a lo largo del año.

Se han vendido todos los décinos, 6 de ellos distribuidos en participaciones de 5 euros en el bar Rojas, en la calle Pintor Barjola, "el bar del barrio", gritaba uno de los agraciados al conocer la buena nueva. Cuando los dueños del establecimiento llegaron pasadas las doce, ya había en la puerta una veintena de amigos que coreaban el número premiado. "Yo sabía que me iba a tocar, porque es el año de la Rojas", brometaba María José Rojas, en referencia a la Selección de Fútbol y a su apellido, que esta vez si le ha dado suerte, pues el bar Rojas lleva seis años comprando el mismo número, el 31.821.

Pero los premios no han parado aquí, porque a mediodía se supo que los empleados de Viajes Marsans, que en Badajoz tiene dos oficinas (en María Auxiliadora y en la avenida de Europa) han sido agraciados con el Gordo de Navidad. Cada uno de estos trabajadores lleva al menos un décimo. Idoia Cloone todavía no se había podido detener a comprobar cuánto dinero le había tocado, porque ni ella ni sus compañeras han dejado de trabajar en toda la mañana y tenían clientes en la oficina.