El macrojuicio a la célula española de Al Qaeda comenzó ayer con la declaración autoexculpatoria del presunto reclutador de terroristas para la red. La Audiencia Nacional celebró la primera sesión contra 24 acusados de formar la red española de Bin Laden, que se enfrentan a una petición fiscal histórica: un total de más de 200.000 años de cárcel. Tres de ellos están acusados de ser cómplices de los pilotos suicidas del 11-S en EEUU.

Cerca de un centenar de policías custodiaron el pabellón rehabilitado de la Casa de Campo donde se celebra la vista. Otro centenar de periodistas, en su mayoría extranjeros, asistieron al primer día del juicio.

CABINA BLINDADA La sesión comenzó con media hora de retraso. Tras unos problemas con el sistema de megafonía, el tribunal comunicó su primera decisión. Uno de los acusados, Jamal Husein, podía abandonar la cabina blindada --donde estaban confinados los imputados-- para sentarse frente al tribunal por problemas de salud. Además, los jueces acordaron liberar al periodista de Al Jazira Tayser Alony, también por motivos de salud.

Cumplidos estos trámites, comenzó el interrogatorio de los acusados. El tribunal optó por cambiar el orden solicitado por el fiscal, que quería comenzar con el testimonio del principal imputado, Imad Eddin Barakat, Abú Dahdah , después de que el letrado del sirio esbozase dos peticiones de nulidad por distintas cuestiones procesales.

ENTRENAMIENTO TERRORISTA Luis José Galán, Yusuf Galán tras su conversión a la religión islámica, abrió el turno de los interrogatorios. El acusado se enfrenta a una petición fiscal de 18 años de cárcel por un delito de pertenencia a banda armada y depósito de explosivos.

El fiscal Pedro Rubira asegura que es uno de los hombres de confianza de Abú Dahdah , ya que le envió a Indonesia para que llevara a cabo un curso de adiestramiento terrorista militar en un campo de entrenamiento controlado por el propio Osama bin Laden. También considera que promovió y exaltó la yihad (guerra santa) y captó jóvenes para esa causa.

El imputado admitió que conocía desde "hace muchos años" a Abú Dahdah , ya que frecuentaban la misma mezquita. Sin embargo, negó que hablaran sobre la guerra santa --"un término cristiano"-- ni que vieran vídeos sobre terrorismo. "Iba a su casa a comer. Su mujer cocina muy bien", señaló.

No obstante, admitió que en su domicilio tenía cintas con contenido bélico. "Son vídeos que están presentes en nuestra sociedad, que pueden verse en el telediario", dijo. También afirmó que guardaba grabaciones de todo tipo. "Tengo vídeos de La clave ". No obstante, apostilló: "Si hubiera sido consciente de que ese material es ilícito, me habría deshecho de él de inmediato".

Respecto a las armas encontradas en su casa (una pistola, una escopeta, una carabina, dos espadas, una catana, una espada masai y un chaleco antifragmentación) explicó que tenía licencia de armas y que practicaba el tiro olímpico. Y añadió: "Provengo de una familia cristiana y en mi casa siempre hemos tenido afición por las armas". Pero aseguró que "jamás" las ha utilizado "contra personas o animales". Además, ofreció una versión peculiar para justificar su vestimenta de muyahidín en una foto. "En mi casa tenemos la costumbre de disfrazarnos".

VISITAR A UN AMIGO Asimismo, negó haber viajado a Indonesia, en julio del 2001, para recibir entrenamiento militar. Aseguró que hizo ese viaje para visitar a su amigo Parlindugan Siregar, Parlin, que está huido.

Galán explicó que compartió casa con Parlin por sus "problemas matrimoniales" y que el huido regresó a Indonesia tras perder el permiso de trabajo. También dijo de él que era "un amigo musulmán, honrado".

Sin embargo, el fiscal sostiene que Galán realizó ese viaje por orden de Abú Dahdah , quien había viajado a ese país en mayo del 2001 para conocer el campo de entrenamiento. Tras ese viaje, el imputado entregó a Abú Dahdah dos cartas de Parlin en las que pedía fondos y armas para la yihad. El acusado negó esa imputación. "Uno me puede pedir la bomba atómica, ¿y qué? En esas cartas Parlin describe con detalle la isla y menciona el conflicto", apostilló.

Galán también aprovechó que había llegado el momento de hablar de él para proclamar su inocencia: "No estoy a favor de Osama bin Laden sino de la justicia y la paz. Los musulmanes queremos vivir en paz, estamos en contra del terrorismo". Y opinó: "Por esos sucesos tremendos del 11-S en EEUU se han provocado muchos muertos".

EL LUNES, EL JEFE La vista se reanudará el próximo lunes con el interrogatorio de los letrados de los otros imputados y de la defensa de Galán. Después, tendrá lugar el interrogatorio más esperado, el del jefe de la red, Abú Dahdah .