Nuevo Gobierno, nueva organización de la Generalitat de Cataluña. El Gabinete que encabeza Pasqual Maragall aprobó ayer una amplia reestructuración de los departamentos para adaptarlos a las necesidades del tripartito, ahorrar costos y dotar a la Administración catalana de más eficacia y transparencia.

La nueva estructura pretende convertir el departamento del consejero jefe y líder de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira, en una macroconsejería y delimita las funciones entre esta cartera y Presidencia.

La reestructuración lleva aparejada el cumplimiento de uno de sus objetivos más emblemáticos: la reducción de altos cargos en un 25%. El portavoz del tripartito, Joaquim Nadal, anunció la supresión de 8 direcciones generales en los 17 departamentos y de 34 cargos eventuales "de alto nivel" con categoría de director general. Esta medida supone un ahorro anual de 3,6 millones de euros (600 millones de pesetas).

Además, el Gobierno aprobó un decreto para regular el número de cargos que podrán ser contratados como eventuales, limitándolo a un máximo de ocho con excepción de Relaciones Institucionales, que podrá tener 10.