La marcha de Bilbao partirá a las cinco de la tarde del Sagrado Corazón y recorrerá la Gran Vía, una de las principales arterias de la capital. Su longitud y sus anchas avenidas proporcionarán buenos planos a los fotógrafos presentes en el acto. El final elegido, ante el ayuntamiento, permitirá un desahogo cómodo y ligero al caudal humano reunido.

El recorrido elegido, que permitirá calibrar con precisión la longitud total de la marcha, ha estado condicionado por las obras de un aparcamiento, ya que, de haber podido, los convocantes hubieran optado por desfilar por la amplísima calle Autonomía, como ocurre en las grandes ocasiones. Pero el riesgo de caos aconsejó un trayecto alternativo.