El presidente del Congreso, Manuel Marín, reclamó ayer a los diputados que traten de mantener la "corrección", no sean mal educados ni falten a los principios de urbanidad durante los debate del estado de la nación. Su intención es evitar que se produzcan las broncas en las que vienen derivando últimamente las sesiones de control al Gobierno. La Cámara decidió ayer que cada uno de los ocho grupos parlamentarios intervenga hoy durante 45 minutos. R. C.