La aritmética parlamentaria también fue objeto de análisis por parte de Rajoy. Se jactó de que los socialistas no tienen ahora con quién pactar y, por ello, aseguró que los escaños populares van a ser cada vez más valiosos. De momento, hizo dos anuncios: pedirá en el Congreso la equiparación de sueldos de policías y guardias civiles con policía auto- nómica, y votará no a la reforma de la ley del aborto. Y habló de economía: no habrá pacto de Estado, dijo, porque se niega a ser "cómplice de políticas disparatadas".