El expresidente del Palau de la Música de Barcelona, Fèlix Millet, y su mano derecha, Jordi Montull, controlaban desde su despacho la obra pública adjudicada por CiU y, de forma más concreta, la línea 9 del metro, la Ciudad de la Justicia de Barcelona y obras hidráulicas. Las pruebas se han hallado en los ordenadores de las secretarias de los dos exdirectivos. En los documentos también se detallan supuestas comisiones del 4% y el presunto desvío de fondos a personas vinculadas a Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) y a la fundación Trias Fargas, ligada al mismo partido. Los papeles fueron entregados ayer por los abogados de la entidad musical al juez Juli Solaz, que investiga desde hace casi un año el saqueo de la institución.