Extracto de la carta enviada por el general José Luis González Arribas al ministro de Defensa, Federico Trillo.

QUEJA"Desde el 26 de mayo, día en que se produjo en Turquía la muerte de mi hijo, he mantenido una actitud de respeto hacia el ministerio para no perjudicar a una institución para la que he dado la mayor parte de mi vida. (...) Sin embargo, ese respeto no se ha visto traducido en un trato igual por parte de los políticos de Defensa y en concreto por usted. (...) No puedo más que calificar como decepcionante la reacción de ciertas autoridades públicas desde el accidente (...)"Sólo hemos recibido de ustedes palabras inconvenientes, malos gestos y descalificaciones hacia las familias, promesas incumplidas, informaciones contradictorias, ocultación de datos. Usted, señor ministro, dice que comparte nuestro dolor, pero llego a pensar que es usted mismo quien lo alimenta (...)"Desde la indignación que me produce todo esto tengo que dejar bien claro que un Ejército profesional no se merece responsables políticos tan incompetentes, que actúan desde la prepotencia y que no asumen sus responsabilidades (...) Me veo obligado a hacer público mi descontento hacia la labor del ministerio. No sólo pido que se sepa cuanto antes la verdad, algo que, desde luego, no se sabrá gracias a ustedes. Les solicito que, al menos, no obstaculicen cualquier investigación y, sobre todo, que asuman públicamente su incompetencia. Sólo de esta forma podremos decir que los responsables políticos están a la altura que el Ejército español se merece."Por la obediencia debida, a sus órdenes".