El PP ha decidido acabar con la imagen de que no quiere pactar nada con el PSOE y por eso bloquea todas los nombramientos en los se requiere el voto de dos tercios o tres quintos del Parlamento. Tras el acuerdo sobre la reforma del Estatuto de la Comunidad Valenciana, ambos partidos pactaron el miércoles reelegir a Enrique Múgica como Defensor del Pueblo y ratificar a todo su equipo, con la exdiputada del PP María Luisa Cava de Llano como adjunta.

El desbloqueo del nombramiento responde, según responsables del partido conservador, a la decisión de recuperar una posición centrista, después de que la radicalización de Mariano Rajoy en el debate del estado de la nación provocase, según las encuestas, que la derecha perdiese apoyo electoral. El PP se había negado hasta ahora a alcanzar con el PSOE cualquier tipo de acuerdo para renovar los cargos institucionales.

Sin embargo, Eduardo Zaplana, portavoz del Grupo Popular, aseguró que el pacto sobre el Defensor del Pueblo no implica alcanzar otros sobre el Consejo de RTVE, el de universidades o la vacante que dejó en el Consejo General del Poder Judicial el ahora ministro del Interior, José Antonio Alonso. "Es un acuerdo aislado", precisó Zaplana.