El pueblo navarro ha rendido un emotivo homenaje a los dos policías asesinados ayer en Sangüesa por ETA durante los funerales oficiados en la catedral de Pamplona, a los que ha asistido el presidente del Gobierno, José María Aznar.En la ceremonia religiosa por Bonifacio Martín y Julián Embid, muertos al estallar la bomba lapa colocada en su coche, han estado también presentes el ministro del Interior, Ángel Acebes, el secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, y el coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, además de las principales autoridades navarras y de otras comunidades.El arzobispo de Pamplona, Fernando Sebastián, quien ha presidido el funeral, ha subrayado en la homilía que "la sociedad entera tiene que levantar un muro firme de rechazo moral contra esta perversión de la conciencia".Enterrados en sus pueblos natalesLos restos mortales de Julián Embid Luna y Bonifacio Martín Hernández serán enterrados en sus localidades natales de Saviñán (Zaragoza) y Sanchorreja (Ávila), respectivamente.Fuentes de la delegación del Gobierno en Navarra han confirmado esta mañana que los féretros partirán hacia dichas localidades tras los funerales, si bien los restos mortales de Bonifacio Martín serán antes incinerados en el Crematorio de Pamplona.