El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, explicó en su día que la vida de su abuelo paterno motivó sus convicciones políticas. El capitán Juan Rodríguez Lozano, leal a la República, fue encarcelado tras la sublevación militar de julio de 1936 y trasladado al campo de concentración de San Marcos. Fue ejecutado el 18 de agosto. Su nombre será uno de los que se grabarán para el recuerdo en la placa masiva de León.