La reforma del Estatuto catalán va camino de pulverizar todos los récords parlamentarios. Los 18 meses de trabajo, 50 reuniones de la ponencia que ha redactado el borrador, dos cumbres de líderes políticos y reuniones bilaterales y trilaterales por doquier no han sido suficientes para allanar la recta final de la tramitación parlamentaria. Los cinco grupos de la Cámara han decidido presentar la friolera de 600 enmiendas a la proposición de ley de la Carta autonómica.

El grupo que lidera el ránking de enmiendas presentadas es el PP: una a la totalidad del proyecto, por considerarlo "inconstitucional e intervencionista", y 282 parciales. "El trabajo de la ponencia no ha servido para nada. Lo inteligente sería retirar el proyecto y volver a empezar", sentenció el ponente popular Francesc Vendrell, para quien el texto no es un Estatuto, "sino un programa electoral, nacionalista y de izquierdas".

El aluvión de enmiendas populares responde a la estrategia del partido de Josep Piqué de demostrar que, aunque sea a costa de lastrarlo, se mantiene en el barco del Estatuto. Y que lo hace dispuesto a "dialogar hasta el último día", a pesar de que no es "nada optimista" en cuanto a las posibilidades de llegar a consensos de aquí al 29, día en que debe votarse en la comisión primera del Parlamento catalán el dictamen de la proposición de ley.

CiU se sitúa en el segundo puesto del ránking. La federación presentará hoy 130 enmiendas. La mitad técnicas, pero la otra mitad de calado: desde el blindaje de competencias al modelo de financiación, pasando por el mantenimiento de la comarca y el modelo de escuela pública y laica.

Las fuerzas del tripartito han presentado sus aportaciones por separado. Los socialistas entregarán esta mañana unas 90 enmiendas, que pretenden ajustar el texto para que no traspase las "líneas rojas" de constitucionalidad marcadas por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.

ERC es autora de 50 enmiendas, algunas de las cuales no están en sintonía con las exigencias del PSOE. Así, los republicanos quieren dejar escrito que el Estado tendrá que reformar seis leyes orgánicas para "dar plena efectividad a las previsiones" del Estatuto, una vez han constatado que el Gobierno de Zapatero quiere construir "cortafuegos", adelantándose a estas peticiones, pero con retoques que no satisfacen las exigencias catalanas. E Iniciativa aporta 49 enmiendas que buscan garantizar la constitucionalidad del texto.