Los partidos vascos se pronunciaron ayer en contra de las últimas decisiones judiciales, por considerar que buscan obstaculizar el proceso de paz. En esta ocasión, la preocupación de las formaciones nacionalistas fue compartida por el PSE, cuyo líder, Patxi López, pidió a los jueces que tengan en cuenta en sus sentencias las "circunstancias" actuales.
El lendakari, Juan José Ibarretxe, optó de nuevo por lanzar un mensaje de confianza, aunque reconoció que las dificultades se acumulan. En un acto de homenaje a 200 fusilados en la guerra civil, celebrado en Hernani, Ibarretxe criticó al Gobierno socialista y a la izquierda aberzale por plantearse el proceso como "una partida de mus" en la que se suceden los "órdagos". Y censuró que el Ejecutivo use los derechos de los presos "como si jugara al ajedrez".
El secretario general de EA, Unai Ziarreta, denunció que "ciertos sectores" de la judicatura "están entrando a hacer política", y les instó a ser conscientes "de lo que está en juego". EA cree que la situación "se está agravando", y culpó a PSOE y PP de haber acordado la designación de determinados miembros del Poder Judicial. "Ahora vemos las consecuencias", sentenció. Miguel Buen, secretario de los socialistas guipuzcoanos, opinó que las últimas decisiones judiciales "no benefician al proceso".
