El lendakari Patxi López aprovechó su discurso en el primer Día de la Ertzaintza para proclamar su convicción de que "está cerca" el momento en que los agentes de la policía vasca no tengan que ocultar su profesión. López definió a los ertzainas como "el orgullo y la esperanza" de Euskadi porque, en su opinión, son "la punta de lanza" que va conquistando más espacios para la libertad.

Cerca de 1.000 invitados se sumaron a la celebración en la base central de la policía vasca en Erandio (Vizcaya), pero no hubo ningún dirigente del PNV, ni de otras fuerzas de la oposición como Aralar, EA y EB. También los sindicatos con presencia en la policía autonómica, el independiente ERNE, los nacionalistas ELA y ESAN y CCOO, decidieron plantar al Ejecutivo socialista.

El lendakari ignoró las ausencias y se comprometió a mantener en el futuro el Ertzaintza Eguna (Día de la Ertzaintza) y a defender en todas partes el "buen nombre" de la policía. El consejero de Interior, Rodolfo Ares, restó importancia al boicot sindical y enmarcó las ausencias en la proximidad de las elecciones que dirimirán la correlación de fuerzas sindicales. Ares también se mostró "seguro" de que "una parte muy importante del colectivo" de presos de ETA quiere que se abandonen las armas.