Un nuevo secuestro en el océano Indico ha puesto en guardia al Gobierno español. Los piratas somalís raptaron el lunes al pesquero Sakoba , cuyo capitán es un portugués nacionalizado español. Sin embargo, el pabellón y la empresa armadora son de Kenia, y entre el resto de los 15 tripulantes no hay ningún español más (la mayoría son africanos). Por ello, el Ejecutivo no se siente en la obligación de convocar el gabinete de crisis que sí se conformó para lograr la liberación del Playa de Bakio y el Alakrana . Aunque, según aseguró un portavoz del Ministerio de Exteriores, se hará "todo lo que se pueda" para resolver el caso.

La empresa Sakald Pesca de Vigo, que comercializa las capturas del Sakoba , aseguró que la nave estaba navegando a 400 millas náuticas (700 kilómetros) al este de Dar es Salaam (Tanzania), cuando fue secuestrada, una información que el Departamento de Miguel Angel Moratinos no quiso confirmar. Según un portavoz de Exteriores, los piratas estaban dirigiendo ayer el barco hacia aguas de Somalia, donde otras fuentes ubican el rapto. La fuerza naval de la UE de la operación Atalanta dijo tener localizado al pesquero.

CASOS ANTERIORES El Ministerio de Exteriores, que se encargará de coordinar el trabajo de los otros departamentos implicados (Medio Ambiente, Medio Rural y Marino y Defensa), insistió en marcar las diferencias con los secuestros anteriores de embarcaciones en el Indico y en señalar que la única vinculación del buque con España es que su capitán es de origen portugués nacionalizado español. "El Sakoba es keniano a todos los efectos, no es un buque español", recalcaron fuentes del Ministerio de Medio Ambiente.

El atunero Playa de Bakio (capturado en abril, 2008) es propiedad de Pesquería Vasco Montañesa y llevaba 26 marineros, entre ellos cinco vascos y ocho gallegos. En el también buque vasco Alakrana (octubre, 2009) viajaban 36 tripulantes, 7 de ellos vascos y 9 gallegos.

Pese a estos antecedentes, Moratinos quiso tranquilizar a los familiares y dijo que "el Gobierno se moviliza cuando cualquier ciudadano español está en peligro, ya se trate de uno solo o varios". De hecho, el jefe de la diplomacia puso a trabajar inmediatamente al embajador en Kenia, Nicolás Martín Cinto, pieza clave para la resolución de secuestros anteriores.

Por otro lado, fuentes del Ejecutivo explicaron a la agencia Efe que sospechan que el Sakoba practicaba la pesca ilegal y añadieron que carece de la baliza habitual para su localización. Esas fuentes dijeron que el barco, que tiene pabellón de Kenia y que lo gestiona una empresa con sede en Ghana, ya ha sido denunciado en alguna otra ocasión por practicar la pesca ilegal.

La empresa de Vigo, con base en el puerto de O Berbés, rechazó cualquier vinculación con la pesca ilegal y puntualizó que fue el arrastrero Sakoba I el denunciado por Greenpeace el 2 de abril del 2006. La compañía gallega explicó que no había conseguido entrar en contacto con el buque y que desconocía el estado de la tripulación.