El Parlamento vasco no afloja su pulso con el Tribunal Supremo. La Mesa de la Cámara de Vitoria decidió ayer con los votos de PNV, EA e IU mantener la subvención a Sozialista Abertzaleak (SA), grupo heredero de Batasuna, por entender que le corresponde el derecho a percibir la asignación mensual destinada a los grupos y que, en su caso, asciende a 30.000 euros (5 millones de pesetas).

Sin embargo, la medida, rechazada por PP y PSE, no puede materializarse porque el interventor se atiene a lo advertido por el Supremo y no concede fondos para los seguidores de Arnaldo Otegi.

De momento, los partidos socios de Gobierno, se comprometieron ayer a "buscar" las posibles vías que permitan solventar "los problemas existentes" y pagar a SA. El acuerdo no puso plazos para el abono de la subvención, lo que permitió a la diputada de SA, Jone Goirizelaia, asegurar que la decisión de la Mesa supone una "maniobra dilatoria".

RETROACTIVO

El acuerdo adoptado recordó que el interventor se negó en junio a pagar la subvención a los herederos de Batasuna tras ser apercibido por el Supremo de su posible procesamiento si no atendía su orden.

El vicepresidente primero, Gorka Knörr (EA) defendió por "pura lógica" que si se reconoce al grupo de SA debe reconocerse su derecho a cobrar. Y añadió que, cuando hallen la forma de hacerlo, se les abonará de forma "retro- activa" hasta junio, el primero en que dejaron de cobrar.