Los nacionalistas vascos y los republicanos dejaron patente lo atentos que están siguiendo el proceso para definir el futuro estatuto de Kosovo. En el debate que tuvo lugar ayer en el Congreso de los Diputados sobre el último Consejo Europeo, Agustí Cerdà (ERC) pidió al Gobierno que acepte con "valentía" la independencia de la región, aunque avisó de que esa secesión sentaría un "precedente incuestionable" para "Cataluña, Euskadi, Flandes y Escocia". Por su parte, Josu Erkoreka (PNV) se burló de que los Veintisiete hayan dejado escrito que el caso "sui géneris" de Kosovo no supone "precedente" alguno. "Excusatio non petita, accusatio manifesta",añadió el peneuvista.