La policía científica ha analizado desde el 11-M más de 25.000 muestras recogidas en los distintos escenarios relacionados con la masacre, ha detectado 1.334 huellas y ha realizado más de cien perfiles genéticos. Todas estas labores, según informó ayer la dirección general de la Policía, se han desarrollado en un "tiempo récord", ya que este tipo de dictámenes "suelen llevar años de investigación".

Las investigaciones han llevado a prisión a 17 personas y han permitido esclarecer casi por completo los distintos aspectos de la trama. Sin embargo, el puzzle no estará completo hasta que se incorporen los detalles que pueda ofrecer el presunto cerebro de la operación terrorista en Madrid, Rabei Osmán Sayed Ahmed, alias Mohamed el Egipcio, detenido en Italia.

El Egipcio podría ser a extraditado a España este próximo octubre por los delitos de asesinato terrorista, matanza terrorista y pertenencia a una organización terrorista. "El atentado fue un proyecto mío y los que han muerto mártires en referencia a los suicidas de Leganés son mis queridísimos amigos", dijo el Egipcio, según consta en la transcripción de las conversaciones telefónicas intervenidas por la policía italiana antes de su detención.