La policía abortó el miércoles un plan de ETA para sembrar el horror en Madrid el día de Nochebuena. Los terroristas pretendían hacer volar con unos 50 kilos de dinamita Titadine el tren Intercity Irún-Madrid 43 minutos después de su llegada a la estación de Chamartín, prevista para las 15.12 horas, en momentos de gran afluencia de personas. La detención en Guipúzcoa de los dos responsables del atentado permitió frenar el tren en Burgos y desactivar la carga de 20 kilos que uno de ellos había alcanzado a introducir.

Ambos etarras, según se supo ayer, son también presuntos autores de colocar otro pequeño explosivo que estalló el martes en la línea férrea que une Zaragoza con Alsasua, y de otro más, también pequeño, en la línea que une Barcelona con Zaragoza a la altura de Alcañiz.

Respecto a la acción fallida del día 24, la maleta bomba viajó tres horas en un vagón. Durante ese tiempo, estuvo expuesta a estallar antes de lo previsto por cualquier error, lo que que hubiera ocasionado una matanza entre los 190 pasajeros del convoy. El ministro del Interior, Angel Acebes, destacó la gravedad del plan por más que los etarras hubieran avisado de sus intenciones antes de perpetrarlo

Los arrestados son Garikoitz Arruarte Santa Cruz y Gorka Loran Lafourcade, integrantes de un comando legal (no fichado) de ETA. Acebes subrayó esta circunstancia para destacar la "dimensión e importancia" de la acción policial, que ha evitado "trágicas consecuencias".

PISTOLA Y PELUCA El operativo condujo en primer lugar a la detención de Arruarte, junto a un coche en el aparcamiento de la estación ferroviaria de San Sebastián. Portaba una mochila con unos 28 kilos de Titadine, abundante cordón detonante, un temporizador, una pistola y una peluca. En el bolsillo llevaba un billete del tren Intercity.

Según fuentes de Interior, la policía montó de inmediato un dispositivo de vigilancia en la estación y, al observar a Loran, sospechó de él y lo siguió hasta la vecina localidad de Hernani. Allí lo detuvo en un "piso refugio", donde se encontró abundante documentación de ETA. Loran confesó que había introducido unos 20 kilogramos del explosivo dentro de una maleta en uno de los vagones. El objetivo era activar la bomba mediante temporizador a las 15.55 horas.

En una acción coordinada de la policía y de Renfe, el tren fue desalojado al llegar a las 11.25 horas a la estación de Burgos, que fue evacuada por completo. A los pasajeros del tren se les explicó que había una "avería" y se les acomodó en autobuses para que prosiguieran su viaje con rumbo a Madrid. Artificieros de los Tedax procedentes de Logroño y Madrid rastrearon los vagones hasta dar con la carga explosiva, que desactivaron.

ITINERARIO El Intercity partió de Irún a la 8.15 horas e hizo la prevista escala en San Sebastián 15 minutos más tarde. Allí esperaban los etarras para colocar la carga explosiva. Antes de llegar a Burgos, el convoy pasó por Vitoria y Miranda del Ebro. Aún debía hacer paradas en Valladolid, Medina del Campo, Avila y Villalba hasta su arribada a la estación de Chamartín. El tren no tenía previsto otro viaje inmediato, por lo cual se preveía proceder a su revisión y limpieza no en el propio andén, sino en el depósito de Renfe en Fuencarral.

Las estaciones de Renfe sólo disponen de escáneres detectores de bombas en Zaragoza, Atocha-Madrid y las estaciones de trenes de alta velocidad (AVE), según informaron fuentes de la compañía. En San Sebastián, donde se colocó el explosivo, no existe este tipo de aparatos.

"Estamos asistiendo a un retroceso de ETA", proclamó eufórico Acebes. La banda ya intentó en el 2002 cometer atentados en Madrid en Navidad.