El nuevo ministro de Defensa, José Antonio Alonso, afirmó ayer al tomar posesión de su nueva cartera que la gran "prioridad" de su gestión será "impulsar una auténtica política de seguridad y de defensa" de la UE, aunque también dio a entender que ello no será incompatible con el fortalecimiento de la presencia española en la OTAN.

Alonso se ofrece, según fuentes de Defensa, para sustituir a los altos cargos civiles nombrados por su predecesor, José Bono, quien ayer le acompañó en la toma de posesión antes de acudir a almorzar a la Zarzuela con el rey Juan Carlos.

Con toda probabilidad, en las próximas semanas serán destituidos el secretario de Estado de Defensa, Francisco Pardo, y el subsecretario del departamento, Justo Zambrana. El único que se mantendrá, según fuentes del Gobierno, será el director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Alberto Sáiz, en quien el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, deposita su confianza.