Zapatero dejó ayer la puerta abierta a nuevos incrementos fiscales al margen de los anunciados para las rentas del capital (las que proceden de depósitos bancarios, fondos de inversión o de las plusvalías por la venta de acciones y viviendas). "No hay nada cerrado", dijo, en referencia al plan en el que trabaja el Ejecutivo, lo que mantiene la incertidumbre sobre si se gravará más a las sociedades de inversión de los grandes patrimonios, llamadas SICAVS. Zapatero solo insistió en que no se tocarán el IRPF y el impuesto de sociedades. En el mitin de hoy en Rodiezmo (León) aclarará algo las cosas.