El Partido Popular de Castilla-La Mancha consideró hoy que el presidente regional, José María Barreda, "consumo ayer su gran traición, diciendo sí al Estatut catalán y no al Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha", al aceptar el nuevo modelo de financiación, que, según el partido de la oposición, supone una pérdida de 365 millones de euros para la región.

Así lo constató en rueda de prensa el diputado regional y secretario general del Grupo Parlamentario Popular, Marcial Marín, que defendió que en base a lo recogido en la disposición adicional primera del nuevo texto de autonomía de la región, que aún no se ha aprobado, Castilla-La Mancha debería de percibir 864 millones de euros, y no 500 millones como finalmente va a obtener del Estado.

Por tanto, el diputado del PP aseveró que la cantidad que Castilla-La Mancha recibirá en este nuevo reparto de la financiación autonómica es "insuficiente", pues según los cálculos de los 'populares', en base a la población, a su Producto Interior Bruto (PIB) y a su superficie , la región debería de percibir un 7,85 por ciento más de dinero del que va a recibir, tal y como se recoge en la nueva norma autonómica. "Pero poco en serio nos tomarán a la hora de aprobar nuestro Estatuto de Autonomía, si Barreda es el primero que lo incumple", apuntó Marín, que preguntado sobre si el escollo de la financiación junto con el del agua provocarán que finalmente las Cortes Generales devuelvan el texto al Parlamento regional.

Sobre este asunto, el parlamentario del Grupo Popular explicó que en caso de que el presidente regional aceptase la cantidad ofrecida, no se corregirá ese desfase en base a lo recogido en el Estatuto de Autonomía, que continúa en el Congreso de los Diputados, y lo que finalmente el Gobierno ha aprobado, "porque si Barreda acepta esta propuesta, invalida e incumple nuestro Estatuto de Autonomía, que es un texto inmaculado", apostilló. En esta línea, Marcial Marín señaló que el PP cree en el Estatuto y en un su financiación adecuada, pero "el Gobierno regional es el que no cree en él, y pone piedras en el camino", añadiendo que, por contra, su partido "lo defenderá a capa y espada".

"Con este nuevo modelo de financiación nos quitan un millón de euros al día", criticó Marín, que defendió que Barreda deberá explicar "por qué un catalán, vale por dos castellano-manchegos", en el reparto de la tarta financiera, pues Cataluña recibe 516 euros por habitante, y Castilla-La Mancha 240. Barreda, en el reparto de la tarta de la financiación autonómica "ha antepuesto los intereses particulares, para que no le quiten el sillón, a los generales", condenó el diputado del PP, que añadió que "no podemos condenar a que Castilla-La Mancha sea una región de segunda".

En este sentido Marcial Marín, afirmó que cuando Barreda, al hablar de financiación autonómica, decía que "la música sonaba bien para la región, lo que le sonaba bien era la sardana y no la música manchega", insistió. Además, el secretario del Grupo Parlamentario Popular lamentó que el presidente regional no haya negociado los fondos mínimos que Castilla-La Mancha debe percibir, fondos que el grupo de la oposición cifra a partir de los 550 millones de euros.

MODELO INSOLIDARIO E INSOSTENIBLE

En otro orden de cosas, el parlamentario del PP prosiguió diciendo que el nuevo modelo de financiación de las comunidades autónomas es "insolidario", porque provoca que las regiones más pobres no puedan converger con las más ricas, que van a recibir más dinero, creándose así "un modelo de dos velocidades".

Además de "insolidario", a Marcial Marín se le antojó "insostenible", pues según defendió el Estado no dispone de dinero para mantener este modelo de financiación autonómica, sin que esto suponga un aumento de la deuda del Gobierno, que tapará con la subida de los impuestos.

CHANTAJE DEL GOBIERNO

De otro lado, preguntado por los medios sobre la posición que las comunidades gobernadas por el Partido Popular han mostrado ante el nuevo modelo de financiación, ante el que se han abstenido y se han opuesto, el diputado 'popular' albaceteño dijo que esta postura de su partido responde a un "chantaje del Gobierno, porque quien diga que no a este modelo perderá todo el dinero, y no podemos perder ni un euro", matizó.

También se pronunció Marín a preguntas de los medios, sobre las manifestaciones realizadas por el diputada nacional del PSOE, Alejandro Alonso, que aseguró que esta posición del Partido Popular va a provocar "catalanofobia".

Sobre el planteamiento de Alonso el diputado del PP se mostró convencido de que "quien fomenta la catalonofobia es quien toma estas decisiones y se apoya en ellas", instando al presidente de la nación, José Luis Rodríguez Zapatero, a que dé explicaciones.