El Partido Popular aumenta la ventaja que tenía sobre el PSOE en estimación de voto y se sitúa 3,3 puntos por encima pese a los casos de corrupción ligados a la trama Gürtel, ya que, según el último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas, los populares conseguirían un 41% de los votos y los socialistas, un 37,7%.

Es la segunda vez desde el 2004, cuando José Luis Rodríguez Zapatero llegó al Palacio de La Moncloa, que el PP supera al PSOE. La primera ocasión se produjo en el anterior barómetro del CIS con estimación de voto, hecho en julio de este año, cuando los populares aventajaron a los socialistas en un punto.

LA MUESTRA DE OCTUBRE

La diferencia ahora ha aumentado gracias al ascenso de ocho décimas del PP y a la caída del PSOE en 1,3 puntos, tal y como refleja el barómetro de octubre. En definitiva, 2,2 puntos de ventaja para los populares.

Los resultados de la encuesta del CIS suponen una especie de bálsamo para el Partido Popular, que mañana celebrará un comité ejecutivo nacional en el que el líder, Mariano Rajoy, tiene previsto dar una respuesta contundente a los recientes casos de corrupción vinculados con la trama Gürtel y a las peleas internas, sobre todo en la Comunidad de Madrid.

La encuesta, no obstante, se preparó entre los días 7 y 14 de octubre, cuando ni siquiera había estallado la polémica por el cese del exsecretario general del PP en la Comunidad Valenciana, Ricardo Costa, supuestamente relacionado con la trama corrupta del caso Gürtel. De hecho, Camps anunció su cese el mismo 14 de octubre.

EVOLUCIÓN DE UPyD

Después del PP, UPyD es el segundo partido que mayor aumento ha registrado en estimación de voto (medio punto), logrando un 3,7%, lo que la convierte en la cuarta formación política por detrás de Izquierda Unida, que obtendría un 4,7% de los sufragios.

CiU, por su parte, lograría también un 3,7% de los votos si las elecciones se celebraran hoy, mientras que ERC tendría el 1,5%, y el PNV un 1,3%.

Asimismo, el CIS muestra como el nivel de confianza de los ciudadanos en el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y en el líder del PP, Mariano Rajoy, sigue descendiendo en comparación con los datos arrojados en el barómetro de julio. La poca o nula confianza al jefe del Ejecutivo ha crecido 4,5 puntos en casi tres meses: si en julio un 67,8% de los encuestados recalcaba su desconfianza hacia Zapatero, ahora afirma lo mismo un 72,3%.

SUSPENDIDOS TODOS LOS LÍDERES

El caso de Rajoy es peor, ya que suscita poca o nula confianza al 80,2% de los ciudadanos, si bien no ha aumentado mucho el nivel de desconfianza desde julio, cuando en esta misma línea se expresaron el 79,9% de los entrevistados.

Con todo, Zapatero es el líder político mejor valorado al lograr un 4,11 de nota. A continuación figuran la presidenta de UPyD, Rosa Díez, que logra un 4,08; el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, con un 3,88; Mariano Rajoy, con un 3,61; el presidente canario, Paulino Rivero, con un 3,16, y el coordinador de IU, Cayo Lara, con un 3,09. Ningún líder político consigue el aprobado.

Tampoco ninguno de los ministros llega al aprobado, aunque el que más se acerca es el responsable del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, que continúa siendo el más valorado, con una puntuación de un 4,77.

PREOCUPACIÓN POR EL PARO

A Rubalcaba le sigue la ministra de Defensa, Carme Chacón, que obtiene un 4,73, y la vicepresidenta primera del Ejecutivo, María Teresa Fernández de la Vega, con un 4,63. La cuarta ministra más valorada es la responsable de Sanidad, Trinidad Jiménez, que obtiene un 4,5. Todos ellos, más el titular de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, están mejor valorados que Zapatero.

Además, la preocupación de los ciudadanos por la clase política y por la corrupción y el fraude ha crecido en el último mes. Según el sondeo, el paro sigue siendo el principal problema de España para el 73 por ciento de los ciudadanos, en tanto que los problemas de índole económica se mantienen como segunda inquietud de acuerdo con el 46,8 por ciento. La inmigración es la tercera.

La clase política y los partidos políticos son el cuarto problema de España, como sostiene el 13,3 por ciento de los encuestados. Igualmente crece la inquietud por la corrupción y el fraude, que en el barómetro de septiembre era mencionada sólo por un 1,4 por ciento y ahora los es por el 5,2.