El Parlament ha dado un paso más para lapidar uno de los vestigios de la dictadura: los juicios sumarísimos en Cataluña. La Cámara catalana ha aprobado la ley que declara nulos los tribunales franquistas y las 63.961 sentencias desde la guerra civil hasta el restablecimiento de la democracia. Aunque hay unanimidad sobre el alto valor simbólico de la medida, no está claro qué efectos jurídicos tendrá cara a la reparación del daño o a las reclamaciones que pudieran producirse.

La ley para reparar a las víctimas y sus familiares la han impulsado Junts pel Sí, la CUP, Catalunya Sí que es Pot y el PSC. Ciutadans también le ha dado su apoyo y el PPC se ha pronunciado finalmente a favor de la iniciativa. De hecho, cuando en octubre se dio vía libre a tramitar la proposición de ley, el diputado popular Fernando Sánchez Costa dejó claro que los populares no se oponían a la tramitación, pero pidió a los impulsores ser "rigurosos" para "no hacer una farsa". Según consideró, "el franquismo merece condena" porque "dejó un reguero de sangre" y sus víctimas "merecen reparación".

El texto declara ilegales "los tribunales de la Auditoría de Guerra del Ejército de Ocupación, llamada posteriormente Auditoría de la IV Región Militar, que actuaron en Cataluña a partir de abril de 1938 hasta diciembre de 1978". Según la nueva norma, fueron "contrarios a la ley y vulneraron las más elementales exigencias del derecho a un juicio justo", por lo que como consecuencia se deduce la nulidad de pleno derecho de "todas las sentencias y resoluciones de las causas instruidas y de los consejos de guerra dictados por causas políticas en Catalunya por el régimen franquista".

El PSC no había impulsado inicialmente la ley y había presentado una proposición alternativa porque, pese a compartir la pertinencia de anular estos juicios, consideraba que esta ley podría tener una "dificultad técnica" al chocar con las competencias del Estado. Pero finalmente, como ha señalado Ferran Pedret, se han sumado a esta iniciativa que la CUP ha defendido como un acto de soberanía. "Mientras ayer [por el miércoles] el PP en el Congreso homenajeaba al líder de la Falange, Rodolfo Martín Villa, hoy en el Parlament anulamos los juicios franquistas", ha destacado Joan Josep Nuet, diputado de Sí que es Pot.

El texto también autoriza al Archivo Nacional de Catalunyapara que elabore y haga pública una lista de los procesos instruidos por el régimen franquista, las sentencias adoptadas, las personas encausadas y la condena impuesta, lista que se deberá publicar el mismo día de la entrada en vigor de la ley.

El portavoz de la Comissió de la Dignitat, Josep Cruanyes, ha explicado que no se busca "la revancha, sino la verdad, la justicia, la reparación y la garantía de no repetición" de los crímenes del franquismo.

OVACIÓN Y 'ELS SEGADORS'

Además de él, durante la votación estaban presentes afectados y familiares, como los de los condenados a muerte Salvador Puig Antich y Juan Paredes Manot, 'Txiki', emocionados al ver cómo prosperaba la anulación de los consejos de guerra durante el franquismo, entre los que destacan el de Lluís Companys y el del diputado de ERC Josep Fàbrega, ambos condenados a muerte. Los diputados se han girado hacia la tribuna de invitados para dedicarles una sonora ovación mientras se cantaba 'Els Segadors' y se escuchaban, puño en alto, gritos de "'visca la República!'".