El PP dio ayer un nuevo paso contra Gregorio Peces-Barba, Alto Comisionado para las Víctimas del Terrorismo. En la sesión del control al Gobierno, el senador conservador Ignacio Cosidó acusó a Peces-Barba de tener por misión "dividir, silenciar y neutralizar a las víctimas", y "amparar a los verdugos terroristas". El presidente del PP, Mariano Rajoy, evitó desautorizar las palabras de su colega de partido.

"El presidente nombró a Peces-Barba como una pieza más en una estrategia de negociación y de diálogo con ETA, para la cual las víctimas son un obstáculo", espetó Cosidó al ministro del Interior, José Antonio Alonso.

REBAUTIZAR EL CARGO Según este senador popular, las víctimas "nunca consentirán" que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero "les diga bonitas palabras por la mañana y que por la noche tenga contactos indecentes e inconfesables con los terroristas". Cosidó pidió al Ejecutivo socialista que, si no echa a Peces-Barba ni él dimite, al menos tenga la "decencia" de rebautizar el cargo que desempeña con el título de "Alto Comisionado para el diálogo y el amparo a los verdugos terroristas".

El ministro Alonso defendió el "prestigio" y la dedicación de Peces-Barba y su "trayectoria ética y profesional intachable" y lamentó que los populares "maltraten" al Alto Comisionado. "¿Cómo va a estar para neutralizar a las víctimas?", se preguntó visiblemente irritado.

INICIO DEL JUICIO EN EL 2006 Por otro lado, la fiscal de la Audiencia Nacional Olga Sánchez, adscrita a la investigación de los atentados del 11-M en Madrid, considera optimistas las previsiones sobre la celebración del juicio en otoño, ya que depende del resultado y tramitación que precisen las comisiones rogatorias cursadas a otros países. "Me gustaría poder empezar el juicio en primavera del 2006", indicó.

La fiscal reveló ayer que los autores de la masacre de Madrid "tenían un proyecto de continuidad delictiva muy amplio" a partir del 4 de abril del 2004 contra objetivos ya elegidos, aunque su "agenda" se truncó con los suicidios del 3 de abril en Leganés.

Sobre la posible relación entre terroristas islamistas y ETA, Sánchez dijo que "a día de hoy no hay ningún dato que haga pensar en dicha relación". En cuanto al estado actual de las investigaciones, la fiscal señaló que se encuentran en una fase "muy interesante e importante".