El PP considera que ya no cabe hablar de negociación con ETA e insiste en que se vuelva al pacto antiterrorista. El secretario de seguridad y justicia del PP, Ignacio Astarloa, calificó ayer la situación de "insostenible" y declaró que, "cuanto menos dure en vigor la propuesta de diálogo, mejor", en referencia a la resolución del debate sobre el estado de la nación. Astarloa reclamó ayer al fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, que "cumpla su palabra" e ilegalice al PCTV (EHAK, en euskera) tras la negativa de esta formación a condenar el atentado que cometió ETA el jueves en Madrid.

El dirigente popular agradeció que el trabajo de "muchas personas durante años" se haya traducido en que Arnaldo Otegi esté acusado de pertenecer a banda armada y recordó que es el fruto de aplicar "una buena política acordada con el PSOE". Pero Astarloa afirmó que "está fuera de toda lógica que, mientras el Estado de derecho asfixia a los de las bombas y las pistolas, se abran expectativas de normalización".

A juicio del PP tampoco es razonable que una persona que ha sido encarcelada ofreciera hace pocos días una rueda de prensa en nombre de EHAK, ya que es "el rostro que usa Batasuna para hacer política". Astarloa juzgó de "extravagante e inexplicable" que ni la Abogacía ni la Fiscalía del Estado hayan presentado ningún recurso ante el Tribunal Supremo para ilegalizar la formación aberzale.

El portavoz del grupo Popular en el Congreso, Eduardo Zaplana, se felicitó de que Otegi esté "donde debe estar" y precisó que esta situación debía haberse producido hace tiempo "si no fuera porque alguno impidió que se pudiera cumplir la ley". Aludió así a Juan María Atutxa, quien se negó a prescindir del grupo parlamentario de Batasuna mientras fue presidente del Parlamento vasco.

Zaplana afirmó que el encarcelamiento de Otegi hace imprescindible ilegalizar EHAK porque ha actuado como su "portavoz y representante", por lo que opinó que la situación deja al Gobierno "al descubierto y sin argumentos". Tras asegurar que los hechos "están dando la razón al PP", alabó la "gran responsabilidad" de Mariano Rajoy porque, "si alguna vez se ha enfadado y ha tenido que ponerse duro, ha sido porque las circunstancias lo han requerido".