El PP aún no ha elegido candidato para las elecciones europeas, pero ya va permitiendo intuir cuál será su mensaje para las campaña previa a esos comicios: si el PSOE de José Luis Rodríguez Zapatero tiene un mal resultado, el presidente debería plantearse adelantar las generales. El primero en defender públicamente esa tesis ha sido el vicesecretario de comunicación del partido, Esteban González Pons, quien, en una entrevista concedida a Europa Press, afirmó que la cita con las urnas en junio del 2009 servirá a los ciudadanos para valorar la gestión que, en tiempos de crisis, ha llevado a cabo el Ejecutivo socialista. "¿Cuántos españoles hay que votaron a Zapatero en las últimas elecciones porque creyeron en su promesa de pleno empleo? Ese español que votó a Zapatero y ahora está en el paro va a tener la oportunidad de decirle lo que piensa en las europeas", enfatizó González Pons.

Está claro, pues, que la dirección popular apostará por obviar, en lo posible, el carácter europeo de esos comicios, aprovechando que se vota en todo el país. ¿Pero qué sucederá si el que sale derrotado es el Partido Popular de Mariano Rajoy?

Ante esa hipótesis, los dirigentes del partido barajan dos respuestas. La primera, la oficial: que Rajoy, líder de la oposición, no es quien tiene que demostrar nada y que, además, obtendrá resultados dignos en las elecciones gallegas y vascas y ganará las europeas. Esa es la que todos defenderán ante micrófonos y cámaras. No obstante, hay un grupo de notables populares --cercanos al líder y no ubicados en el sector crítico-- que, en conversaciones informales, admiten que una derrota en junio sería letal para Rajoy y sus aspiraciones al frente del PP.

Es más, vaticinan que, si se diera esa posibilidad, se verían obligados a convocar congreso extraordinario ese mismo verano y buscar otro presidente nacional. Por el momento, tienen que encontrar candidato para las europeas y decidir si ratifican a Jaime Mayor Oreja o apuestan por la renovación (ha sonado insistentemente el nombre de Alberto Ruiz-Gallardón).

También la secretaria general de ese partido, Dolores de Cospedal, habló ayer de elecciones, aunque de las que se celebrarán en los próximos meses en Euskadi. A su juicio, es fundamental "hacer todo lo posible" para que el nuevo Gobierno no tenga, esta vez, color nacionalista.

ECHAR AL PNV En declaraciones a Efe, Cospedal evitó aclarar si eso suponía que, en caso de que el socialista Patxi López venza en las urnas al peneuvista Juan José Ibarretxe, los populares le darán apoyo. Eso sí, la dirigente popular reiteró que su partido hará cuanto esté en su mano para favorecer la derrota del PNV y terminar de ese modo el "enfrentamiento permanente".