Todos los partidos de la oposición en el Parlamento balear abandonaron ayer la sesión plenaria tras negarse el PP y Unió Mallorquina a debatir una moción urgente presentada sobre el caso de presunta corrupción en Andratx que solicitaba que la institución asumiese la gestión urbanística del municipio. La oposición reclamaba, además, que el presidente del Govern balear, el popular Jaume Matas, asumiera responsabilidades políticas. J. M.