Con el ritmo de Dale a tu cuerpo alegría, Macarena como conjura contra la crisis, el PP arremetió de ayer contra la política fiscal y económica del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero, al que calificó como el dirigente que "más ha engañado a los ciudadanos en democracia". Y lo hizo con una exhibición de fuerza, en plena crisis interna por los nuevos datos del caso Gürtel , en uno de los lugares emblemáticos de los socialistas, el municipio sevillano de Dos Hermanas, tradicional granero de votos del PSOE. Hasta allí los populares consiguieron convocar a unas 25.000 personas.
El presidente del PP, Mariano Rajoy, repitió los mismos argumentos que empleó el sábado antes de conocer en detalle la reforma fiscal del Gobierno, y subrayó que la subida fiscal "no se justifica, es innecesaria y profundamente insolidaria" con las clases medias y trabajadoras --a las que dijo representar su partido--, ya que el dinero no se empleará para cubrir necesidades sociales. Y reiteró que el incremento viene motivado por la necesidad de "tapar los agujeros" que han creado con políticas "disparatadas" de gasto público.
Arropado por miles de seguidores venidos desde todos los rincones de Andalucía en más de 400 autobuses y que no paraban de corear "Zapatero, dimisión" o "Zapatero, embustero", Rajoy agradeció tanto entusiasmo en un feudo tan simbólico para los socialistas.
GASOLINA Es "la gasolina" que el PP necesita para llegar a la Moncloa y poner así "fin a dos años de mentiras, soberbia, chapuzas e improvisación", dijo. Acusó al presidente del Ejecutivo de ignorar a las autoridades económicas de todo el mundo e incluso a sus compañeros de partido, como el exministro de Economía Pedro Solbes. Un periodo también de sectarismo, denunció, en el que el Gobierno ha hecho que el país "se divida en buenos y malos, ricos y pobres, sindicatos y empresarios", y en el que "no hay cabida para la inmensa mayoría de las clases medias". Rajoy expuso su apoyo a políticas en defensa del interés general, "pero no políticas disparatadas que hundan al país".
"Estamos demostrando que la gente sabe que las cosas se pueden hacer de otra manera y que no nos vamos a resignar sin dar batalla", esgrimió el líder popular, tras insistir en que la receta contra la crisis pasa por "ahorrar y gastar menos" y por un cambio de políticas y de Gobierno, "hacer exactamente lo contrario de lo que están haciendo hasta ahora". La número dos del PP, Dolores de Cospedal, clamó contra el anuncio del PSOE de ejecutar una ofensiva pedagógica para explicar la subida de impuestos, y se preguntó "cómo se le explica a un parado que va a tener que pagar la deuda" generada.
