El PP quiere que los españoles contesten o no a esta pregunta: "¿Considera conveniente que España siga siendo una única nación en la que todos sus ciudadanos sean iguales en derechos, obligaciones, así como en el acceso a las prestaciones públicas?". Para que se celebre la consulta, Rajoy aclaró que el PP presentará una proposición no de ley para la que recabará apoyo ciudadano con "millones de firmas".

No se trata de una iniciativa legislativa popular, como sostuvo el martes por la mañana Rajoy. Ese tipo de iniciativas no sirven para promover referendos sobre leyes orgánicas como es el Estatuto, ya que la Constitución lo veta expresamente. El martes por la tarde Rajoy supo de esa pega, por lo que instará a José Luis Rodríguez Zapatero a que sea él quien convoque la consulta. Las firmas sólo servirán para darle "más apoyo político". El PP recogerá firmas por toda España, "incluida Cataluña".

Aunque la recogida de firmas se estudiará en el próximo comité ejecutivo, la idea es recabar apoyos en cualquier acto del partido e incluso en mesas petitorias en la calle. Rajoy admitió su inexperiencia en este aspecto y no detalló el plazo ni cuántas quieren conseguir: "Nunca he promovido una recogida, pero la haremos con todas las de la ley".