Líderes del PP han hecho llegar a Mariano Rajoy su impresión de que debe dar un mayor impulso a su lanzamiento como candidato para las elecciones del 2004, comenzar a ofrecer propuestas concretas y tener una presencia pública más permanente.

Este intercambio de opiniones sobre la estrategia del líder del PP se produjo el pasado lunes en la habitual reunión de maitines que congrega al secretario general, los tres vicesecretarios, el ministro portavoz del Gobierno y los asesores del líder del partido.

Rajoy escuchó con atención las recomendaciones del núcleo duro de dirigentes, ya que es el primer interesado en corregir errores, según personas de su entorno. Fuentes próximas a algunos asistentes indicaron, sin embargo, que el asunto fue secundario dentro de un análisis general sobre la situación política.

MARCAR EL TIEMPO Este debate interno, sin embargo, se produjo dos días después de que Rajoy dijera en Sevilla que él fijaba las prioridades, marcaba los tiempos y la forma de reaccionar ante los acontecimientos.

Rajoy ha instruido a la cúpula del PP para que no baje la guardia porque el objetivo es mantener la mayoría absoluta y el PSOE goza de una alta fidelidad de su voto tradicional.

La tardanza en resolver la polémica por la subida de impuestos en Madrid, en la que las opiniones de Rajoy aparecieron como una más entre el coro de dirigentes, fue una muestra de su estilo, pero se echó de menos la firmeza del liderazgo.

SIN NOVEDADES Hasta la fecha, Mariano Rajoy ha cumplido con su plan de no desvelar las novedades de su programa electoral hasta que en enero comience la precampaña. Ante el temor de algunos dirigentes a que la formación pierda la iniciativa política que ha tenido casi permanentemente, fuentes próximas al candidato indicaron que algo va a cambiar. En la conferencia sobre política económica que dio el pasado martes en Madrid, Rajoy ya se lanzó a concretar sus prioridades.