La posibilidad de que el nuevo partido de Rosa Díez pueda atraer en Euskadi al voto más beligerante contra el nacionalismo ha encendido las luces de alarma en el sector del PP vasco alineado con el desafío lanzado por María San Gil. Respaldan el paso dado por su presidenta y lo justifican en defensa de un espacio electoral que peligraría ante un acercamiento al PNV.

El hecho de que un exdirigente popular como Fernando Maura sea cartel de UPD en Euskadi refuerza entre los seguidores de San Gil la opinión de que no cabe cesión alguna. Por eso apoyan que su presidenta se haya puesto firme para frenar toda rebaja en el discurso de firmeza.

Por el contrario, quienes entienden que en determinados momentos y circunstancias se debe modular la intransigencia manifestada hasta ahora, discrepan del gesto de su presidenta y esperan que reconduzca la situación.

CONCLAVE DE JULIO La web el PP vasco mantenía ayer activo el vídeo que recoge la intervención de San Gil cuando, el viernes, explicó en rueda de prensa las razones de su decisión. En su intervención, San Gil anunció también un congreso extraordinario para julio. Hoy, a las siete de la tarde, la directiva regional se reunirá en la sede en San Sebastián para dirimir si apoya celebrar el cónclave.