"Puedo decir con contundencia que el Gobierno está en una apuesta decidida por la Comunidad Valenciana". A la candidatura de Joan Ignasi Pla no le van a faltar apoyos desde los presupuestos generales del Estado, a juzgar por el despliegue de inversiones que ayer detalló Zapatero. La obra estrella, el AVE Madrid-Valencia, estará en funcionamiento en el 2010. "Lo haremos en seis años", resumió el presidente, que reveló que a su llegada a la Moncloa el proyecto de alta velocidad estaba en el 1% de ejecución. El acelerón socialista ha permitido pasar de los 96 kilómetros que estaban ejecutados o en obra en mayo del 2004 a los 364 que ahora se encuentran en esa fase. Pero como antes del 2010 hay elecciones, para la Copa América, que se celebra el año que viene, el jefe del Ejecutivo prometió que se reducirá a "tres horas" el tiempo que lleva hoy recorrer en tren la distancia entre Valencia y Madrid.

Zapatero también defendió su política hidráulica frente al trasvase del Ebro que planeó el PP y derogó el PSOE. Así, explicó que las desaladoras proporcionarán 570 hectómetros cúbicos más de agua en cuanto estén acabadas, sin depender del caudal del Ebro.