El grado al que ha llegado el enfrentamiento entre el PSOE y el PP por el proceso de paz ha trastocado los planes de José Luis Rodríguez Zapatero, que ha renunciado a comunicar hoy al Congreso la apertura del diálogo con ETA. La comparecencia del presidente queda pospuesta hasta el próximo pleno ordinario de junio, en la semana posterior al referendo por el Estatuto de Cataluña del 18-J, según fuentes próximas a Zapatero.

El líder del PSOE tomó ayer la decisión de evidenciar hoy en el Congreso el aislamiento del PP en el proceso de paz. El partido de Mariano Rajoy defenderá en solitario la resolución al debate de la nación que el PP decidió presentar el viernes, en la que pretende limitar la capacidad del presidente para conducir el proceso de paz, prohibiendo cualquier iniciativa de diálogo hasta lograr el compromiso de ETA de renunciar definitivamente a la violencia. Rajoy pretende defender esa resolución para explicar que la decisión de Zapatero de permitir el diálogo entre el PSE y Batasuna le ha decidido a retirar su apoyo al Gobierno.

Todos los grupos votarán en contra, empezando por el PSOE. Zapatero asistirá al pleno, pero no intervendrá. Los socialistas han decidido que sea Julio Villarrubia, el secretario general del grupo parlamentario, quien replique a Rajoy defendiendo el no del PSOE. José Blanco informó ayer de que la dirección del PSOE conocía la iniciativa del PSE de reunirse con Batasuna para "empujarla" a cumplir la legalidad y que la ejecutiva apoya esa idea de forma "unánime".

"No detendremos el proceso de paz por la crisis interna del PP", sentenció ayer Blanco tras la reunión de la ejecutiva. A su juicio, Rajoy se ha servido del anuncio de reunión con Batasuna como "excusa" para retirar su apoyo a Zapatero, algo que le reclamaban desde el principio los sectores más duros de su partido. "Es un pretexto tan absurdo como si en Irlanda dijeran que se puede hablar con el IRA pero no con Gerry Adams", argumentó Blanco equiparando a Arnaldo Otegi con el líder del Sinn Féin.

EXPLICAR EL DISENSO La dirección del PSOE está convencida de que "hay consenso social sobre el objetivo, que es buscar la paz, el método para lograrla, que es el diálogo, y el marco para llevar el proceso adelante, que es la Constitución", dijo Blanco. Y será el PP quien "tendrá que explicar" por qué "deja ese consenso" antes de que Zapatero contacte con ETA para iniciarlo.

"No se puede retirar el apoyo antes de conocer la estrategia del Gobierno, antes de que comparezca el presidente. Quien busca excusas para hacerlo es que tenía la decisión tomada desde antes", argumentó el secretario de organización del PSOE. Para demostrarlo, Blanco consideró incompatible que el líder del PP apoyara hoy al presidente si este comunicaba al Congreso el diálogo con ETA y el próximo sábado acudiera a la manifestación de la Asociación Víctimas del Terrorismo para protestar contra el Gobierno.

Pese al tono de reproche, Blanco dijo ayer que el Gobierno mantiene "abierto" el diálogo con el PP para reconducirlo al consenso. El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, insistió en la oferta de "máximo esfuerzo" al PP para recuperar su "confianza". Tras el debate de hoy en el Congreso, el Gobierno tiene dos semanas para recuperar el diálogo con el PP.